Residencia Cooper-Nichols, Cadícamo, nº3

**Autumn K.Cooper-Nichols** Jue Ago 06, 2009 2:05 am

En aquel camino serpenteante, cubierto de árboles, unos cientos de metros antes de llegar a la mansión de los Burdock, una imponente residencia se erige en un claro, cautivando las miradas de todos los paseantes. Quizás demasiado grande para las únicas dos personas que viven allí, además de los sirvientes.

Al ingresar por la entrada principal, un amplio recibidor deslumbra gracias a su imponencia. Atravesando una puerta a tono con los colores de éste, se ingresa al comedor, de dimensiones considerablemente menores a las del impactante hall. Por una pequeña y disimulada puerta se pasa a las cocinas, donde el señor Cooper-Nichols y su hija suelen comer cuando no tienen visitas.

Regresando al hall, a través de una arcada se pasa a un pasillo donde se encuentran las puertas de los baños, dos cuartos de baño exactamente idénticos, uno destinado a los hombres y el otro a las mujeres. Al final del pasillo hay una puerta de madera vidriada que da lugar al salón de música que solía utilizar la madre de Autumn, pero que ahora ha quedado más bien como un recuerdo abandonado.

A través de unas grandes escaleras se sube a la primer planta, donde hay un amplio corredor con varias puertas. Las dos primeras dan a los baños, nuevamente divididos por género. Las puertas del final dan a los cuartos de Autumn y su padre.

Si se continúa ascendiendo por la escalera, se llega a una tercera planta, exclusivamente reservada para el salón de fiestas y para el depósito del mismo, donde se guardan todos los muebles que no necesiten ser utilizados en determinados eventos. Sin embargo, esta última planta generalmente permanece vacía.

Por último, detrás de la casa se encuentra la piscina, con un bonito quincho detrás.

**Autumn K.Cooper-Nichols** Jue Ago 06, 2009 2:26 am

Baja junto con Eddy por el paseo arbolado de Cadícamo y finalmente llegan a unas enormes puertas enrejadas, a través de las cuales se puede observar una de las mansiones más enormes y lujosas de la ciudad. Se quita la mochila de los hombros y con un tintineo saca un llavero, con el control automático para abrir la reja. Sin miramientos aprieta el botón plateado, pues era un control digno de una señorita con mucho dinero, haciendo que las puertas se abran sin el más mínimo chirrido. Se gira para mirar al que acababa de bautizar como su nuevo amigo y, sin quitarse el pendiente, se queda mirándolo.

- ¿Dónde vives? No me agradaría que te tengas que ir solo a tu casa. Si quieres puedes pasar y te pido un coche… O quizás podría pedirle a Miles que te llevara… - se queda pensativa, balanceándose para atrás y para adelante, apoyando talones y puntas de los pies alternadamente. Su aspecto tan dulce habría ablandado a cualquiera. A cualquiera que tuviera un corazón.

**Edward Carnby** Jue Ago 06, 2009 2:44 am

Jooooooder, menuda casa, por no decir mansión... Sólo el jardín ya es más grande que su apartamento... Definitivamente no se había equivocado con ella y tenía un dineral, o bueno, sus padres, pero el problema es que era... Distinta a lo que acostumbraba de estos barrios, n como Tara, pero sí demasiado... Inocente, buena...

La voz de ella le saca de sus caivlaciones, teniéndola enfrente ybalanceándose como una niña adorable... Jode,r así es imposible. Bufa molesto consigo mismo, pero rápidamente responde a sus consejos:

- Vivo bastante lejos, Autunm... Pero mejor que no llames a nadie, voy muy sucio para que me vean,¿sabes?- En realidad es que lo calarían, aunque no fuese el caso, con soberana rapidez y tendría que salir corriendo- ¿ Hay alguien en tu casa?- Pregunta con curiosidad, ya que está y todavía meditando si le roba o no, que contemple el lujo de los pijos.

**Autumn K.Cooper-Nichols** Jue Ago 06, 2009 2:53 am

Detiene su balanceo al oír la negativa. La desilusionaba que se negara después de todo lo que había hecho por ella. Utilizando sus manos toma un mechón a cada lado de su rostro y comienza a enroscarlos, en una mezcla de actitud inocente y tonta. Comienza a andar hacia la entrada de la casa, dando largas zancadas como si de una especie de juego se tratara. Una persona muy hábil habría descubierto que estaba salteando las líneas de unión de las baldosas, un entretenimiento un tanto extraño que le encantaba.

- Oh, pero… No te dirán nada… Bueno, si quieres te puedes dar una ducha y cambiarte, seguramente habrá algún traje por allí que puedas usar – habla lo suficientemente fuerte como para que la oiga el chico… Y todos sus vecinos. Pero por suerte, entre “casa” y “casa” hay un espacio lo suficientemente grande como para ahogar hasta las músicas más fuertes. Al oír la última pregunta, se detiene en seco y se voltea, mostrando una actitud completamente inexpresiva.

- Sólo los sirvientes, pero a estas horas estarán o en el subsuelo o en las cocinas. Y mi doncella probablemente esté arreglándome el cuarto para la noche. Mi padre está de viaje… - su rostro se ensombrece por unos segundos, pues lo extrañaba hasta cuando iba al baño. Luego vuelve a sonreír, esta vez mostrando un dejo picaresco, cual una niña pequeña, y continúa su marcha para perderse por la puerta de entrada.

**Edward Carnby** Jue Ago 06, 2009 3:23 am

Era imposible que fuese tan inocent,e pero no hacía falta más que mirarla a los ojos para darse cuenta de que ni era fachada ni mentía, estaba siendo totalmente sincera... Y eso le hacía sentirse mal consigo mismo, joder... La escucha atentamente, negando con la cabeza al ver que no ha comprendido lo que quería decir, pero decide seguirla y echar un vistazo ya que sus padres no están y el personal andará ocupado o durmiendo, facilitándole la tarea de que nadie lo vea:

- Me gusta cómo visto, el problema es que hay gente a la que no le gusta...- Se explica en voz baja, observando la entrada con curiosidad, con el hall más grande que toda su casa y desde luego mucho más lujosa- Y no chilles tanto, que habrá gente durmiendo y no queremos despertarlas, ¿ vale?- La advierte, en realidad es para que no le pillen... Pero el reflejo del agua sobre el cristal le hace desviar la mirada hacia la ventana que da a la parte trasera...

Una piscina, de verdad, privada, de las de película... No puede contenerse y avanza por el comedor, parándose justo en la salida a la misma, con una sonrisa entre divertida y pícara- ¿ Un bañito?

**Autumn K.Cooper-Nichols** Jue Ago 06, 2009 3:35 am

Una vez adentro, se mueve como pez en el agua, trasladándose mucho más rápida y grácil que cuando danzaba por la mitad de las calles. Se detiene en el centro del hall, dejando que la araña que colgaba del techo derrame toda su luz sobre ella, sacando destellos cobrizos de su cabello. Hace un puchero con los labios al oírlo. A ella nunca le decían nada malo, no comprendía por qué a otros los trataban diferentes. Aunque a decir verdad, estaba pensando demasiado por ser ella. Generalmente se quedaba sumida en la nada, pensando sin pensar. Quizás fuera la compañía del desconocido la que la incitaba a explorar aquel universo desconocido para ella: su propia mente.

- Pues para mí no vistes mal – analiza las vestimentas del joven por vez primera. La verdad es que no se fijaba mucho en como iban las personas, así que no podía decir que fuera desubicada su ropa o no-. La verdad que te veo como a cualquier persona. Sisi… Llevas remera y pantalones y… bueno… Eh… Yo creo que eres bastante alto, sí… Ese cabello… ¡Oh, mira! Hay un mosquito volando, ¡qué bonito!

Definitivamente había sido demasiado meditar para ella, ni siquiera escucha su último comentario, sino que se dedica a perseguir y saltar detrás del mosquito por toda la sala, cual una versión rubia de Heidi saltarina. Cuando el insecto se pierde de su vista, o bien, su vista se pierde del insecto, decide ir al comedor para pedirle la cena a alguno de los sirvientes. En eso se encuentra con una figura mirando por la ventana.

- ¿Hola? ¿Quién e… ¡Oh! ¡Eddy! Había olvidado que estabas aquí… - pronuncia velozmente, atropellándose con sus propias palabras-. ¿Un bañito dices? Oh, están en el pasillo atravesando el recibidor, ¿te muestro el camino?

**Edward Carnby** Jue Ago 06, 2009 3:43 am

Decide esperar una respuesta tneiendo un mínimo de educaicón, y lo que se encuentra es a Autunm dando saltos persiguiendo un mosquito como si fuese la cosa más entretenida del mundo. Parpadea un par de veces, asimilando que hoy no se ha tomado nada y que lo que ve es absolutamente real, viéndola desaparecer por los pasillos, todavía en un estado algo atontado.

Cuando vuelve le resulta imposible creer que ya se haya olvidado de él cuando ha sido ella quién le ha invitado.. Y en cierto modo esa actitud que es la primera vez que ve, estúpida podría llamarse, es lo que provoca que le inspire cierta ternura y no continúe con lo que tenía dispuesto. Ante sus últimas palabras niega con la cabeza, divertido:

- Digo en la piscina, Autumn... ¿ Te apetece?

**Autumn K.Cooper-Nichols** Jue Ago 06, 2009 3:51 am

Suelta una risita tonta, ruborizándose apenas, mientras abre las puertas que dan a la piscina. Se quita los zapatos y comienza a caminar descalza por las baldosas, dirigiéndose luego hacia el pasto para continuar su camino hacia la casa de la pileta. Como en ese momento se encontraba vacía, allí solían guardar los bañadores y las toallas para secarse.

- Espérame que me cambio, sino mi doncella me reprenderá en caso de que arruine el vestido – esa es la única respuesta que obtiene Eddy, siendo evidente que su propuesta había sido tomada con agrado. Al ingresar a la casa, escoge el primer bikini que tiene a mano, sin darse cuenta de que llevaba la parte superior violeta de uno y la parte inferior naranja de otro. Se coloca su vestidito de marinera azul y blanco encima, pues a pesar de ser media lela algo de pudor tenía. Toma un bañador de su padre, dos toallones enormes, dos batas y sale cargando con todo, balanceándose a causa del peso, además de obstruir su vista a causa de la pila de cosas-. Aquí tengo un bañador para ti…

**Edward Carnby** Jue Ago 06, 2009 5:54 pm

Menuuuda piscina, sí señor... Al menos ella acepta, así que sin más la sigue fuera, pudiendo contemplarla más directamente. Se acluquilla en el borde metiendo la mano en el agua y dándose cuenta de que está a temperatura algo fresquita, pero soportable. La sigue con la mirada, asntiendo despacio aunque algo extrañado, las pocas veces que se había colado en una de estas con mujeres se habían bañado en ropa interior...

Peor supone que al estar en su casa, es cmprensible, y más viendo cómo es. En cambio él no tiene bañador, así que se despoja de la camiseta de tirantes, dejando su cuerpo, delgado pero marcado y adornado con diversas cicatrices, visible, para luego repetir el proceso con los vaqueros, que se quita con cuidado para no perder el pendiente.

Una vez hecho, fuera zapatillas y calcetines, únicamente con los boxers negros, y en el mismo momento en que ella insinua que se ponga el bañador de su viejo, se lanza con las rodillas flexionadas a la piscina, en modo bomba, saliendo al segundo con el pelo cayendo por su cara y una sonrisa divertida:

- No me hace falta, gracias- Comenta tranquilamente, nadando hacia ella y apoyándose en el borde, esperando a que se decida.

**Autumn K.Cooper-Nichols** Jue Ago 06, 2009 6:11 pm

Logra deshacerse del cargamento antes de que se le caiga a la pileta. Lo apoya sobre una reposera y toma el bañador, dispuesta a dárselo a Eddy. Por suerte, sabe medianamente como atender a sus invitados, aunque a veces quizás sea demasiado preocupada por ellos. Sus ojos pasan rápidamente de la ropa hecha un montón al joven metido en la piscina. Instantáneamente se lleva las manos, con bañador incluido, hacia los ojos.

- ¡OH DIOS MIO ESTAS DESNUDO! - chilla horrorizada, como si acabara de ver el miembro de alguien paseándole por adelante. Joder si sería exagerada con respecto a aquellos temas. Se aproxima al borde, todavía con el vestidito puesto y el bañador en la mano. Estira su brazo con la prenda en dirección al muchacho-. Póntelo, anda... - implora en un susurro, incapaz de quitarse la mano de los ojos.

Al ver que el joven no hace ningún gesto para tomarlo, se permite espiar por entre los ojos, advirtiendo un manchón negro en el cuerpo del joven gracias a las luces internas de la pileta.
- Oh, tienes algo puesto... Pero... ¿Estás en ropa interior? - su voz denota una ligera exageración, no adrede, sino totalmente sincera. También le daba cosita aquello, aunque al menos no vería partes íntimas flotando por la pileta. Aunque ella a ciencia cierta tampoco sabía como lucía la cosa de un hombre, así que no podía imaginarlo. Ni tampoco tenía ganas. Aún tenía esa parte infantil de ella fuertemente aferrada a su espíritu.

- Te lo dejaré aquí si quieres... - comenta más como un pedido que una proposición. Regresa a la reposera donde había dejado las toallas y los batones y se queda allí de espaldas. Se balancea con suavidad mientras se quita el vestido marinero, como si estuviera danzando al son de un vals. Completamente inconciente de las reacciones que su delicada y esbelta figura podía provocar en alguien como Eddy, regresa hacia el borde de la piscina dando pequeños saltos. Aquel encanto inconcientemente seductor se ve interrumpido al grito de...

- ¡BOMBAAA! - sin pensárselo dos veces, salta hacia adelante, tomándose de las rodillas, para caer en forma de bomba en el centro de la pileta. Algunas gotitas perdidas llegan hasta el muchacho, pero como está mojado no es gran cosa.

**Edward Carnby** Jue Ago 06, 2009 7:04 pm

La mira con una ceja enarcada pero sin borrar la sonrisa al ver cómo se horroriza, sis e pone así por verlo en calzoncillos... Ya de entradas supone que o debe ser virgen o debe tener un sentido del pudor muy pero que muy estricto. EN cualquier caso observa el bañador y chasquea la lengua, es feo de cojones y no se lo piensa poner.

A´si que la observa quitarse el vestido y venir dando saltitos, quedándose flipando de ver lo que ocultaba tanta tela... La chcia está rato buena, pero con esa personalidad medio lo estropea medio lo hace imposible. Suspira, era un desperdicio pero él tampoco podía quejarse, últimamente las cosas le marchaban bien en ese aspecto. Se cubre con el antebrazo al prevenir lo que va a hacer, evitando que le salpique agua a los ojos y girando despaico para encararla una vez sale a flote:

- Sí, voy en calzoncillos... Oye, en serio,¿ A ti tus padres no te han hablado de... Ya sabes... Chicos y chicas?- Pregunta con curiosidad, no era normal alterarse así.

**Autumn K.Cooper-Nichols** Jue Ago 06, 2009 7:18 pm

Se sumerge en el agua y bucea con agilidad hasta llegar a donde Eddy, saliendo a la superficie con un saltito. El cabello ahora mojado dejaba entrever el brillo del pendiente que había olvidado quitarse, llamando inconcientemente a Eddy para que lo robara. Se queda flotando frente a él, con los brazos sobre la cabeza, moviendo únicamente los pies.

- Pues más te vale no quitártelos - le advierte, poniendo carita de enojada, aunque sin estarlo. Si de niñerías se hablaba, ella era toda una especialista. Lo escucha atentamente y se queda pensativa, procesando las palabras, sin terminar de comprender. Le lleva un buen rato darse cuenta de qué es lo que quiere decir y lo examina con sus grandes ojos azules, como si esperara encontrar la respuesta a su pregunta en las pupilas del muchacho.

- Yo... Sé que tenemos diferencias y... Que las mujeres tenemos ciertas cosas todos los meses... - comienza como si fuera lo más natural del mundo hablar de la regla con un muchacho que le había robado un pendiente sin que lo notara-. Pero mi padre no me habla mucho del tema y mi madre está muerta, así que... - se encoge de hombros, diciéndolo como si fuera lo más normal del mundo. La verdad es que el dicho popular era cierto, no se puede extrañar lo que nunca se tuvo. A su progenitora apenas la había conocido, por lo que no recordaba nada de ella. Salvo los instrumentos en la sala de música.

El movimiento de hombros hace que se hunda por unos segundos, volviendo luego a salir a la superficie, esta vez flotando como perrito. Con su estatura no muy grande le resultaba imposible tocar el fondo con los pies

**Edward Carnby** Jue Ago 06, 2009 10:22 pm

Deja que se acerque sin moverse del bord,e simplemente se deja hundir, mojándose la cara y el pelo y volviendo a ascende,r apartandçoselo de la cara con un par de movimientos para ver mejor. EL pendiente le sigue llamando demasiado,y más ahora que está brillante, pero tiene que centrarse en que no se los va a aquitar, que le da demasiada pena como para hacerlo...

Agita la cabeza ante su propio dilema existente, centrándose en lo que le dice y esbozando una mueca entre extrañada y divertida:

- Se llama regla- Le explica tranquilamente- Pero no me refería a eso precisamente... No es normal que te alteres tanto viendo a un tío en calzoncillos, lo lógico sería que te guste y esas cosas, no poner cara de estar viendo un muerto- Le explica, burlándose de ella ligeramente pero sin borrar la sonrisa. Tal vez la ausencia de madre le había provocado una personalidad así, o es que simplemente parecía tonta, por no decir quelo era. La cuestión es que no le importa demasiado- ¿ Te interesa saber cosas?- Pregunta con inocencia, mirándola fijamente.

**Autumn K.Cooper-Nichols** Vie Ago 07, 2009 3:14 am

Continúa a flote, manteniendo su cabeza fuera del agua con movimientos acompasados. Una vez que se cansa, cuelga los brazos por encima del borde de la pileta, dejando su cuerpo estirado sobre la superficie del agua, pataleando con suavidad.

- ¿Regla? Oh, sí… Yo creía que algo tenía que ver con el colegio, pero no podía recordar si se le llamaba compás, o goma… Ay, no sé - dice más para ella que para el muchacho. Sus oídos captan todas y cada una de las palabras, aunque sin advertir el tono burlón de estas.

- Pero es que… ¡Pensé que estabas desnudo! ¿Por qué me gustaría verte desunu… - se interrumpe automáticamente. Ella, Autumn Kadence Cooper-Nichols había escuchado algo que para ella solo indicaba una cosa: ¡cotilleos!

- ¿Saber cosas? ¿Me dirás un secreto? Oh, sí, cuenta, cuenta - no intenta ocultar su entusiasmo en lo absoluto, sino que acerca más su rostro al de él, dispuesta a compartir aquello que él tuviera que decirle, como si fueran mejores amigos de toda la vida.

**Edward Carnby** Vie Ago 07, 2009 11:20 pm

¿ Hola? ¿ Qué tendrá que ver una regla de clase con la que él le ha comentado...?. Desde luego la chica no estaba bien, aumentando la penita que sentia y por lo tanto dificultando un robo que ya sabía de antemano que no iba a realizar... AL menoss e estaba dando un baño en una piscina de lujo, algo era algo..:

- No tiene nada que ver una cosa con la otra, Autumn, pero bueno, si así eres feliz...- La sigue con la mirada en lo que se extiende sobre el agua apoyándose en el borde con las manos, negando con la cabeza- A no ser que seas lesbiana un tío desnudo tendría que gustarte, se´ria lo normal- Comenta con calma, divitiéndose al mismo tiempo...

Y en ese momento se le acerca hasta quedar cerquita, de nuevo sin entender qué es lo que pretende... No tiene ningún secreto que contarle, le había malinterpretado- Esas cosas no se cuentan, se práctican, Autumn... Algún día las practicarás, supongo- Comenta, encogiéndose de hombros y sin molestarle su cercanía, si la chica fuese consciente y normal, le tentaría, pero así va a ser que no.

**Autumn K.Cooper-Nichols** Vie Ago 07, 2009 11:35 pm

Le parece que Eddy estuviera hablando chino básico, pues ya se ha olvidado totalmente de lo que ella le había dicho. Pero no es algo que le importe, no. La gente para ella suele hablar demasiado complicado a veces. Suelta una risita tonta al escucharlo. Qué cosas decía... ¿Cómo podía insinuar que ella fuera una...

- ...Lesbiana? Jiji ¿Y eso que es? ¿Si nunca me gusta nadie me convertiré en una? ¿Es lindo serlo? Oye... Pero a mi no me gusta nadie... En realidad... Me gustan todos... ¡Todo el mundo es increíblemente geniaaaaaal! - y con el último gritito se va hundiendo, girando sobre si misma. Una vez toca el fondo con las rodillas, toma fuertemente los tobillos del chico y se impulsa hacia arriba, haciendo que este se hunda mientras ella sale a la superficie.

- ¿No tienes ningún secreto? Oh... Pero yo creía... - su rostro se entristece ante la perspectiva de que todo haya sido una vana ilusión. Enseguida recobra su vitalidad cuando escucha lo último-. ¿Practicar? ¿Es como un juego? Oh... Que bonito... ¿Me enseñas? ¿Me enseñas? - pestanea repetidamente, coronando su angelical expresión con una de las más deslumbrantes sonrisas, demostrando cuan blancos eran sus dientes perfectos.

**Edward Carnby** Vie Ago 07, 2009 11:48 pm

O vivía muy aislada o no veía la televisión, porque para no saber lo que es una lesbiana, o un homosexual e general, tenía que ser una de las dos opciones que se barajaba en silencio. Le resulta imposible camuflar su sorpresa cuando ella empieza a hablar y a dar vuelta,s cerrando los ojos un segundo antes de que le hunda y saliendo a la superficie un segundo después.

Agita la cabeza y los abre de nuevo, enfocándola justo cuando empieza a preguntar... ¿ Cómo coño la iba a enseñar si ni siquiera sabía lo que era?:

- Sí, puede verse como un juego... Y es divertido y gratificante jugarlo, la verdad- Comenta más para él mismo que para ella, con una sonrisa en los labios- Lesbianas son las mujeres a las que le gustan otras mujeres desde un punto de vista no sólo como el tuyo, si no sexual, porque te estoy hablando de SEXO, Autumn, SEXO... Ahora me dirás que tampoco sabes que es, ¿ me equivoco?. Venga, piensátelo debajo, que el agua fría ayuda a despejarse- Y sin más apoya una de sus manos en la cabeza de la chica y la hunde hacia abajo, aguantándola unos pocos segundos para luego soltarla.

**Autumn K.Cooper-Nichols** Sáb Ago 08, 2009 12:03 am

Lo mira hablar, sí, sí, el chico parecía ser un experto. ¿Pero en qué? Cuando empieza a explicarle algo que probablemente olvide horas después, pone mucha atención, tanta que sólo le faltaba una libretita para ser la estudiante estudiosa más tragalibros del mundo. Y mencionando el estudio, tenía varias cosas que hacer como deberes de verano, aunque probablemente se los haría su doncella, como siempre... Que a ella le resultaba tan difícil comprender porque un número se llamaba pis... ¿Quién en su sano juicio le pondría ese nombre a algo del colegio?

- Lesbianas... ¿Sexual? - inquiere, no muy segura de a que se refiere, hasta que finalmente le cae la ficha-. Claaaaaro, Eddy, ya sé de que hablas... ¡Sexo! Sí, sí... Tú un chico, yo una chica... -explica como si fuera la definición más normal del mundo-. Porque las chicas son un sexo, ¿verdad?

Se queda unas milésimas de segundos flotando, mirándolo con cara de pastel, hasta que la hunde, haciendo que suelte una gran bocanada de burbujas y que trague una cantidad considerable de agua. Cuando sale a la superficie lo hace con la cara de feliz cumpleaños más inocente del mundo.

- ¡Ya entendí! ¡Ya entendí! ¡Es una guerra de sexo! ¡Chicos contra chicas! Que juego más entretenido... Wiiiiiiii - dicho esto, toma aire y se hunde a gran velocidad, tomando a Eddy por los pies para arrastrarlo hasta el fondo. ¡Qué genial era este amigo que le enseñaba tantas cosas divertidas!

**Edward Carnby** Mar Ago 11, 2009 2:00 am

¿ Lo ha entendido?. Diría que sí, pero no hace falta más que verla a los ojos para darse cuenta de que no es así, capta el significado pero no el contexto... Definitivamente, esto va a ser más complicado que asaltar un jodido banco:

- Vamos a ver, Autumn, las chicas no SON un sexo, el sexo se PRACTICA, es como un... Deporte, ¿ entiendes?. Lo normal es chico- chica, pero hay exc...- No llega a acabar ya que de repente parece que ella se anima y acaba de nuevo hundido a su altura, flotando para mantenerse debajo. Ha tragado algo de agua pero se esfuerza en no toser y perder el aire. Entorna los ojos y la mira con cara de " te has fumado algo", antes de abalanzarse sobre ella buceando y pincharle las costillas sin compasión alguna...

Al menos, subirá ella primero.

**Autumn K.Cooper-Nichols** Mar Ago 11, 2009 2:17 am

Una vez debajo del agua, lo observa con los mofletes inflados, en un intento de sonrisa. Se le hubiera ocurrido sacarle la lengua, pero en ese caso se habría ahogado o algo por el estilo. Por lo tanto, se limita a flotar con los pelos suspendidos en distintas direcciones, aguardando a que el muchacho haga algo. Es entonces cuando se abalanza sobre ella y le pincha en mitad del torso, produciéndole un dolor considerable que la hace lanzar un grito por debajo del agua. Asciende rápidamente a la superficie, masajeándose en el lugar donde le había hecho presión, a la espera de que el joven asome su cabeza.

- ¡Me ha dolido! ¿De verdad es tan doloroso jugar a ese deporte? ¿Me voy a lastimar mucho? - no para de cuestionarlo, esperando que no le quede ninguna secuela importante por tan extraña cosa. No, no. Se pone a flotar panza arriba, haciendo ángeles sobre el agua, descansando de su primera lesión del juego. Entonces, en el momento más inesperado, se vuelve a levantar y se tira eencima de Eddy, dándole un cabezazo adrede para luego volver a hundirlo, sin experimentar ella el más mínimo dolor en su dura cabezota.

**Edward Carnby** Mar Ago 11, 2009 2:25 am

Consigue lo que busca, bueno a medias, puesto que andaba buscando cosquillas y no hacerle daño... El caso es que sale a flote antes que él, emergiendo un segundo después que ella. La escucha atentamente y no puede hacer más que romper a reír, es tan jodidamente surrealista todo, tan... Estúpido. La mira con unos ojos mezcla de diversión y burla:

- ¿ En serio crees que a esto se le llama practicar sexo?. No tiene absolutamente nada que ver- Le responde tajante, siguiéndola con la mirada hasta que se cansa y empieza a analizar el lugar dónde estan con ojos curiosos...

Y cuando menos se lo espera, zasca, cabezazo.le sorprende ver la fuerza con la que le da, y además sin querer, emitiendo un leve quejido ya que ha recibido peores y echándose hacia atrás, pero no tiene tiempo, con los ojos cerrados como está, de esquivar , de evitar que le hunda. Se recupera con soberana rapidez y desempolva esa agilidad que suele tener oculta, atrpándola de las piernas ysumergiéndola a su altura.

Coloca la palmas de su mano sobre el vientre de ella y nada, ejerciendo presión y echándola hacia atrás hasta que toca la pared, momento en el cual asciende y la obliga a ascender, quedando cara a cara:

- Pierdes el tiempo intentando ganarme a esto, cielo...

**Autumn K.Cooper-Nichols** Mar Ago 11, 2009 3:58 am

El cabezazo no le duele en lo absoluto, demasiado acostumbrada estaba a golpearse la cabeza a causa de sus continuas distracciones. Una vez lo hunde, se queda tranquilamente flotando, hasta que de improviso la lleva a ella hacia abajo, casi sin dejarla tomar aire. Lo único que alcanza a hacer es soltar un leve gritito de sorpresa, seguido por una inhalación apurada de oxígeno, antes de desaparecer en el húmedo medio.

Cuando la toma por la panza, se ve impulsada hacia atrás sin poder hacer nada por evitarlo. El golpe contra la pared de la piscina es suave, por lo que no le molesta ni nada parecido. Sin embargo, a diferencia de la piel entre sus costillas, su vientre era propenso a sufrir cosquillas, por lo que el contacto de las manos del muchacho comienza a hacer que se desternille de la risa, sin siquiera poder controlar la ingesta de agua mientras la sube a la superficie.

- Jajaja, ay… Yo… Yo sí puedo ganar… Por favor… Jajaja… Suéltame… - pronuncia con la voz entrecortada. Definitivamente, era una chica extraña. Parecía más bien la sensibilidad de un bebé hacia el contacto en el vientre, que a las cosquillas que debería poseer una persona con los órganos más desarrollados.

- Ahora me vengaré de tiiii – exclama con soltura, abalanzándose sobre el muchacho para meterle mano en cualquier lugar donde el joven pudiera ser sensible, obviamente, evitando toda la zona alrededor y en el boxer de Eddy. Todo le parecía un simple entretenimiento entre amigos, sin siquiera imaginarse que estaba confraternizando con alguien a quien su padre le habría cortado la cabeza de tan solo verlo con su hija.

Eran taaaaan divertidos los juegos que le enseñaba el muchacho. Realmente estaba super duper hiper happy de haberlo conocido.

**Edward Carnby** Miér Ago 12, 2009 3:34 am

Toma nota mentalmente de que en el estómago sí tiene cosquillas , tanto para cualquier momento como para otro encuentro, aunque si es tan surrealista como este necesitará descansar bastante tiempo para no comerse la cabeza con tonterías...

Y de repente las tornas cambian y es él el que se ve atacado por todos lados. Le sorprende la rapidez con la que se muevne las manos de ella por su cuerpo, mordiéndose el labio para evitar reírse en las zonas sensibles y así no darle pistas de dónde pinchar y dónde no. La deja unos segundos, soltando una única carcajada como recompensa a sus esfuerzos antes de tomarla de las muñecas y quedar frente a frente...

Aunque sus ojos azules, vívidos y astutos, se des´vian ahcia e edificio cuando una luz se enciende en una de las ventanas del segundo piso. Desvía la mirada rápidament,e si lo pillan así, en ese mismo momento parece algo que no es... Esboza una sonrisa muy pero que muy divertida.... ¿ Por qué no?.

Sin decir nada acorta las distancias entre ambas caras y junta ambos labios, besándola con intensidad y frenesí durante apenas cinco segundos, antes de separarse y subir de un ágil salto al bordillo. Se reincorpora con rapidez y aún chorreando recoge su ropa, encaramçandose al seto. Gira en ese momento la cara para mirarla y le guiña un ojo con descaro:

- Eso que te acabo de hacer es el principio del juego llamado sexo... Si te ha gustado ya sabes, pásate por el parque más a menudo... Y toma- Rebusca en el blsillo del pantalón con agilidad y deja el pendiente en el suelo-Están perfectamente- Dice rápidamente, tirando la ropa por encima del seto y tomando carrerilla para saltar, más bien tirarse, el seto y desaparecer sin dejar rastro.

**Autumn K.Cooper-Nichols** Miér Ago 12, 2009 3:54 am

Sus manos continúan deslizándose picaronamente por el torso del muchacho, sin dar un mínimo respiro al esfuerzo que hacía éste para no reírse. Sonríe satisfecha cuando ve que Eddy suelta una carcajada. Estaba aprendiendo cada vez más acerca de ese juego que el muchacho quería enseñarle y definitivamente era genial. No obstante, se ve de improviso tomada por las muñecas, sin poder hacer nada para remediarlo.

- Eh... ¿Hola? - inquiere, repentinamente confundida, prestando atención en como pasea la mirada de la casa, donde la doncella acababa de encender una luz, hacia ella. Está abriendo la boca para decirle que le molesta estar aprisionada contra el borde de la pileta, cuando se la cierra, o mejor dicho se la abre, introduciéndole la lengua hasta el esternón.

Se queda repentinamente idiotizada, por aquella fugacidad con que había sucedido todo. Los ojos desencajados dejan repentinamente de mirarlo y se limita a flotar sin sentido mientras el joven sale de la piscina. La... ¿Qué le había hecho? Era algo parecido a las películas, pero... Sí... No... No podía ser... ¡LA HABIA BESADO! ¡Eso no debía pasarle a ella!

Escucha a duras penas las últimas palabras del chico, sin siquiera percatarse de que depositaba el pendiente en el suelo. Poco a poco comienza a hundirse en el agua, aún con la mirada perdida, mientras el muchacho abandona el lugar. Unos treinta segundos después vuelve a ascender a la superficie y se acerca al borde para salir del agua con la vista completamente ida.

Comienza a caminar arrastrando los pies hacia ninguna parte, cuando la doncella sale alertada por la puerta. Pero qué hace señorita, que no ve, es de noche, mire si andar jugando con su amiga imaginaria a esta hora... Las palabras llegan con delay a su cerebro, mientras es conducida hacia el interior de la residencia. Su criada ni se imaginaba que había estado con alguien de carne y hueso allí, simplemente pensaba que era alguno de los juegos extraños de la niña. Ella en lo único que podía pensar era que a pesar del trauma y del horror, en el fondo, muy al fondo de su cuerpo, la sensación no había sido tan fea.

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