Re: Blizzard Street 23

**Dita Alighieri** Jue Sep 17, 2009 5:04 pm

Lo siguiente que sabe es que le ha echado por encima el medio vaso de absenta que le quedaba. Su cara es una máscara de asombro que él no ve pero que sabe perfectamente que está ahí. Tiene los muslos bastante salpicados de motitas verdes, igual que la camiseta en general.

Si quiere jugar… ella no se quedará atrás, piensa observando a Eddy que se encuentra de espalda a ellas. Lame unas motas de absenta del dorso de su mano mientras una pequeña idea le viene a la cabeza al escuchar lo del suavizante. Con una sonrisa maliciosa plantada en la cara, se acerca silenciosa a un Eddy distraído que al parecer ha encontrado el suavizante exclamando un triunfante ‘Aquí estás’, con los brazos alargados para tomarlo a la altura de los hombros, le da un rodillazo a su rodilla izquierda, lo que hace que se le doblen las piernas y pierda el equilibrio, aprovechando para empujarle al suelo por los hombros.

Una vez está en el suelo en un ágil movimiento se sienta encima de su estómago, con la sonrisa más ancha todavía y más maliciosa, si cabe. Toma el bote de suavizante de su mano y lo mueve de lado a lado, mirando a Eddy con una ceja alzada. – Una forma muy rápida de rebajar Eddykins, probemos qué tal lo hago yo…- Y tal y como ha dicho lo hace, en un rápido movimiento ha destapado el bote y empieza a echárselo por encima de la cabeza, cubriendo su pelo y riendo. – A ver si hace el mismo efecto que en la ropa, suave y liso.

**Edward Carnby** Jue Sep 17, 2009 5:13 pm

Tras unos segundos rebuscando finalmente lo encuentra, y se dispone a girarse para culminar la broma cuando se encuentra con un rodillazo en las suyas que le hace perder el equilibrioy caer al suelo. Por suerte equilibra el cuerpo para no hacerse demasiado año, aunque un breve "hmpf" escapa de sus labios, más de sorpresa que de dolor..

Y cuandos e dispone a levantarse se la encuentra encima. La mira fijamente como si la cosa no fuese con él y no la acabase de salpicar de alcohol, mirando con cierta aprensión y mirada inocente el suavizante:

- No serás capaz de...- Con un suspiro ahogado acaba con la cabeza embadurnada de suavizante. Se pasa la mano por el pringoso pelo en lo que la escucha, y sin previo aviso rompe a carcajadaas, buscando relajarla... Hasta que llega su momento y voltea el cuerpo con rapidez, quedando ahora él encima y ella debajo:

- ¿ Ves?. Mis suposiciones eran correctas... Los tienes bien puestos, me gusta...- Se vuelve a pasar la mano por el pelo y se la pasa después por la cara, manchándola más aún y levantándose con una media sonrisa, esperando a ver sid ecide continuar la pelea o prefiere dejarlo en tablas.

**Dita Alighieri** Dom Sep 20, 2009 4:56 am

Es cuando él empieza a reírse que ella se le une, dejando atrás la modosa sonrisa y cambiándola por sinceras carcajadas… Mal hecho, él aprovecha la distracción para cambiar las tornas, quedando él encima y ella debajo, aunque eso no hace que deje de reír.

Entre risas y suspiros responde a sus palabras. – Ah Eddy, no es la primera vez que me lo dicen, pero siempre hace gracia que te alaben algo así, así que gracias. – Responde con una extensa sonrisa. Observa con los ojos entrecerrados y una ceja alzada, aunque manteniendo la sonrisa, como se vuelve a pasar la mano por el pelo y como luego la acerca peligrosamente a su cara para, finalmente, embadurnarla como si de una india se tratara. Suelta una carcajada mientras se levanta y con un dedo se quita el suavizante de la cara. Se acerca a él quedando su rostro a centímetros del de él, acerca una mano a su pelo, pringándose de suavizante y con un rápido movimiento, le pasa el dedo por encima del labio superior y el mentón, simulando un bigote y perilla. – Mírate, qué mono. – Comenta con una expresión inocente, antes de volver al sofá limpiándose los restos de suavizante en el short y tomar asiento. Con la misma expresión, se lleva a los labios la chocolatina que tenía a medias, manteniendo la mirada fija en la de él.

**Edward Carnby** Lun Sep 21, 2009 9:22 pm

Al menos su intuición no falla tanto como esperaba en un principio y la observa levantarse aún con ganas de seguir el juego, un juego que se torna tan interesante como "peligroso" cuando ella se acerca más hacia él. Mantiene la media sonrisa a caballo entre la burla y la tentación, con un brillo en su mirada inocente que contrasta mucho con el resto de su expresión. La escucha y entorna los ojos, convirtiéndolos en un par de rendijas azules y eléctricas, dispuestas a electrocutarla de forma irremediable si se lo propone o le deja:

- Ya me suponía que no sería el primero...- Se deja, sorprendentemente, embadurnar la cara, notando el frío gel y siendo capaz de intuir las formas que le dibuja. Se mantiene impasible y la observa comer chocolate desde el sofá, hasta que finalmente se acerca a ella y se deja caer a su lado, apoyando los brazos sobre el respaldo y estirándose, aunque mirándola de reojo:

-¿Tú crees...?. Tú tampoco tienes mala pinta...- Estira uno de sus dedos limpios y bordea justo por encima de los labios de ella, hasta que en un movimiento rápido le arrebata la poca chocolatina que le queda- Comiendo chocolate- Termina por concluir llevándose de un bocado el trozo que quedaba.

**Dita Alighieri** Miér Sep 23, 2009 1:11 am

Una sonrisa ladeada se le escapa mirando a Eddy, medio escondida detrás del chocolate. Le sigue con la mirada fija hasta que se pone cómodo en el sofá.

- Lo creo… - Susurra retirando un momento el trozo de chocolatina de sus labios, aunque probablemente se trate de una pregunta retórica, un murmullo suave. Sigue con la mirada fija en él, observando atenta todos sus movimientos y expresiones. Aquellos ojos azules probablemente eran capaces de hipnotizar, que fuera así con ella o no, era algo que no dejaría ver, pues le cortaría el rollo al juego que se traían y se lo estaba pasando demasiado bien. Siente su caricia, sabe que algo viene, lo espera. Y cuando él le arrebata el último trozo que le quedaba, le dedica una sonrisa torcida.

– Que te aproveche – Le sonríe y como si nada, alarga el brazo hasta donde ha dejado Eddy las otras chocolatinas y toma la primera que encuentra, abriéndola con parsimonia. Su mirada se posa en sus piernas, sus mulos todos llenos de pequeñas motas verdosas. Absenta seca, lo que es sinónimo de pegajoso. Pasa su mirada a Eddy mientras se levanta del sofá y se pone delante de él.

- Eddy, ¿algo con lo que pueda limpiar este desastre? – Pregunta sin especificar el qué, pues cree que se sobreentiende. Deja la tableta entre los dientes, una mano posada en su cadera y la otra señalando sus muslos desnudos. Su cara muestra una expresión de confusión e inocencia totalmente fingida cuando le dirige la mirada. Solía ser como un libro abierto, pero si había algo que se le daba bien era actuar, cosa que le servía de mucho para ocultar según qué estados.

**Edward Carnby** Miér Sep 23, 2009 2:03 pm

Ese susurro que le dedica aumenta de forma gradual su interés, aunque también sabe jugar y no va a darle muestras de nada tan rápido. Saborea la chocolatina antes de acabar de comérsela y deja que se coja otra, total, tiene de sobra y le salen gratis más o menos:

- Mira, yo pienso igual...- No hace falta que se explique, realmente la chica es atractiva. Desvía la mirada al suelo parcialmente mojado hasta que, sin darse cuenta, se la encuentra delante. La simple pose que lleva resulta sugerente,e n conjunto con la mirada que le dedica, que intuye que es fingida pero que, para que va a mentir, le gusta:

- Se me ocurren varias formas de quitarlo... - Comenta primero en un falso tono pensativo, con la mirada pasando de sus muslos a los ojos de ella- Pero creo que te referirás a una ducha,lavabo o similar, ¿ no?- Comenta con diversión, levantándose y quedando frente a ella. No es excesivamente alto, de hecho están a una altura muy similar, pero tampoco es que le haga falta más altura para resultar tentador..

No dice nada más, se queda enfrente y espera a que le de una respuesta para saber si tiene que guiarla o, por el contrario, le sorprende de nuevo.

**Dita Alighieri** Vie Sep 25, 2009 2:01 am

Ante su respuesta esboza una sonrisa ladeada a modo de agradecimiento silencioso. Empieza a mordisquear distraídamente la chocolatina a la espera de su respuesta.
Un brillo de diversión reluce en sus ojos ante la respuesta de él.

- Una ducha no estaría mal… - Comenta llevándose la chocolatina al mentón, como haría con el dedo en un acto reflejo de pose pensativa, teniendo la suerte de no mancharse. – Pero con un paño húmedo me espabilo. – Termina con una sonrisa y llevándose el chocolate a los labios, solamente dejándola reposar encima, sin comer. Mientras le observa levantarse, aprovecha para darle otro vistazo al chico, no era del todo su estilo, pero lo aceptaría sin rechistar…

Le viene a la mente la imagen de cierto rubio herido. Su rostro muestra un ligero gesto de confusión que se afana por desterrar rápidamente. Últimamente, la imagen de Dmitri la asaltaba sin más, y cada vez más frecuentemente. No sabía lo que eso representaba, ¿sería cosa del síndrome de Estocolmo? Quizá le iría bien contárselo a alguien, quizá un psicólogo o algún entendido… Sacude ligeramente la cabeza y posa su mirada en la de él que, sin darse cuenta, se encuentra frente a ella. Se queda quieta, frente a él a la espera de que sea el primero en reaccionar.

**Edward Carnby** Vie Sep 25, 2009 2:06 am

Como finalmente elige paño humedo, esboza una media sonrisa y se aparta dando un paso lateral, acercándose de nuevo a la cocina y rebuscando entre los cajones, ya no buscando un paño, que tiene, si no uno que esté medianamente limpio. Tras cinco minutos de búsqueda lo encuentra, y en su expresión parece que haya encontrado lea cripta perdida o similar.

Lo humedece en la pila y lo escurre un poco, dejándolo húmedo y acercándose de nuevo a ella. Se lo tiende en un gesto de nuevo aparentemente servicial, pero que va imprimido de cierto toque de rebeldía automático:

- Aquí tienes... Yo espero que lo de mi pelo se vaya, como se me quede desteñido...- La mata directamente, para algo bonito que tiene y se le podía joder... Aprovecha y se vuelve a sentar en lo que ella se limpia, siendo lo suficientemente disimulado para mirar sin que tampoco se sienta observada.

**Dita Alighieri** Vie Sep 25, 2009 2:35 am

Vuelve a darle mordisquitos a la tableta, más por hacer algo qué por comer. Cuando el chico se va, pasea la mirada por la estancia todavía en pie. Al cabo de unos minutos, vuelve con el paño húmedo, listo para su utilización.

- Gracias – Tiende el brazo riendo por el modo en que se lo entrega. Tal y como está se pasa el paño por las mejillas para quitarse el suavizante. Luego, lentamente se va pasando el paño por los muslos, inclinándose un poco hacia delante para tener mejor acceso. Primero el derecho, luego el izquierdo. En movimientos suaves y lentos acaba quitándose la absenta. – Eso te iba a decir, no sé qué puede pasarle a esa maravilla de pelo si sigues con el suavizante de la ropa a modo de mascarilla… Yo que tú me lo aclararía ya. – Comenta levantando la cabeza y dirigiendo su mirada a él, pero sin cesar en la limpieza. Es consciente todo el tiempo de la mirada del chico posada en ella aunque se empeñe en disimularlo, esas cosas las tenía por la mano debido a la costumbre.

Una vez termina, se incorpora y a paso lento se acerca al muchacho, con la vista fija en sus ojos azules. Una vez enfrente, con suavidad le quita el improvisado bigote y la perilla, pasando la mirada de sus ojos a sus labios sin ningún disimulo.

**Edward Carnby** Vie Sep 25, 2009 2:42 am

Ciertamente el paño funciona a las mil maravillas... Pero el problema es que se fija más en las piernas que en el paño, o bueno, todo el conjuunto en sí, sí, eso... Ya no sabe ni lo que piensa. Aparta la mirada para serenarse en lo que ella termina, auqnue no puede evitar dedicarle miradas de reojo, pensando que si fuese al revés ella no perde´ria detalle y no sintiéndose así algo raro..

Ambas miradas se cruzan y se la aguanta, escuchándola atentamente. Por mal que le pese tiene razón. Va a levantarse cuando ella se le acerca más y se queda quieto, a medias sentado y a medias de pie. Se deja quitar el suavizante de la cara y después se pasa el dorso de la mano para que no esté tan manchado, levantándose de nuevo y quedando enfrente otra vez:

- Aunque antes...- Sin previo aviso se lanza a por sus labios y le arrea un filetazo de los que dejan sin aliento, rápido e intenso, durante al menos diez segundos. Una vez hecho se separa y trecupera el aire, mucho más satisfecho- Ahora sí- Susurra, pasando por su lado como si tal cosa y dirigiéndose a la ducha.

**Dita Alighieri** Vie Sep 25, 2009 4:04 am

Después de perderse unos segundos contemplando sus, en apariencia, suaves labios vuelve a posar la mirada en sus ojos, pero antes de que pueda hacer nada, se ve presa de sus labios. Se ve envuelta en un intenso beso, que tal como llega, se va, dejándola sin respiración. Parpadea rápidamente y toma aire profundamente, la ha tomado por sorpresa. No se esperaba que la besara, o quizá sí… El hecho es que no hay de qué quejarse, al chico se le da bien y un beso siempre es bien recibido.

Lo sigue con la mirada hasta verlo desaparecer por la puerta, se encoge de hombros, como si nada y se dirige hacia donde creer recordar le ha dicho que estaba la cocina. Efectivamente así es, se pasa la lengua por los labios en un movimiento sutil, saboreándole, mientras abre el grifo y aclara el paño, más como un acto reflejo para ocupar el tiempo a solas que por educación.

**Edward Carnby** Vie Sep 25, 2009 4:27 am

Acciona el agua fría y se pone de rodillas enfrente de la ducha, introduciendo sólo la cabeza y mojandósela repetidas veces, usando una de sus manos para aclararlo y quitarse el suavizante del pelo. Tras unos pocos minutos se levanta, chorreante y rebusca a tientas la toalla de la pared, secándose el pelo con movimientos enérgicos y rápidos, aunque se la deja colgada del cuello para evitar empaparse demasiado por los retos. Vuelve a asomarse por el pasillo hasta alcanzar el comedor, dónde no la encuentra.

Va a preguntar dónde anda, o si se ha marchado, cuando la ve en la cocina, mirándola con cierta diversión:

- No hacía falta que lo lavases, ¿ eh?- Le aclara por si no lo sabía, apoyado en el marco de la entrada al comedor.

**Dita Alighieri** Sáb Sep 26, 2009 12:12 am

Se vuelve hacia la puerta al oír la voz del chico. Con el pelo mojado, la toalla colgada de su cuello y una fina gota bajándole por la sien ofrecía una imagen que como mínimo era atrayente. Muy atrayente… Enarca una ceja y dibuja una sonrisa pícara con la mirada posada en él.

- Lo sé pero cosa que ensucio, cosa que limpio. Pero bueno, ha sido más por dejar de comer chocolatinas que por quedar bien. – Comenta medio bromeando medio enserio. – Aunque ya tendré tiempo para quemar las chocolatinas… - Dice con un tono de voz más bajo, casi para sí misma, todavía con la vista posada en él. - ¿Qué tal el pelo, suave? – Pregunta maliciosa recostándose contra la encimera.

**Edward Carnby** Sáb Sep 26, 2009 12:16 am

No pierde detalle de la expresión de ella, y como lo está mirando deduce que es por él, aunque no se ve nada distinto a antes ni tampoco da señales de percatarse. Se va acercando a ella tranquilamente, escuchándola en lo que va hablando y sin borrar la sonrisa divertida:

- Pues mi pelo lo has ensuciado y me lo he limpiado yo solito... Así que esa regla no te funciona del todo... Y sí, el deporte hace milagros- Responde a ese comentario en voz baja, que tipo de deporte, no lo dice, allá la imaginación de ella. Ante su broma se palpa el pelo y decide secárselo un poco más con movimientos rápidos, aunque su mirada se queda fija en la de ella:

- No sé, dímelo tú.

**Dita Alighieri** Sáb Sep 26, 2009 1:02 am

Ríe ante su respuesta y menea la cabeza de lado a lado a modo de negación. Reposa los codos sobre la encimera, ve acercarse a Eddy tranquilamente.

- Haberlo pedido, quizá me lo habría pensado y todo. Sí, el deporte…– Esboza una sonrisa algo críptica pero con matices pícaros ante el último comentario. Con una ceja enarcada y divertida observa como se seca el pelo de un modo bastante… poco delicado. Hombres…

- Déjame ver… - Lleva las manos al pelo húmedo, por debajo de la toalla, haciéndola caer en sus hombros. Acariciando con los dedos extendidos, sintiendo su suavidad y un ligero cosquilleo en las palmas. – Parece que por ahora bien, habrá que ver como está una vez seco. – Y seguidamente toma la toalla y en movimientos suaves pero firmes empieza a secarle el pelo, sus movimientos son como caricias, casi como un masaje.

**Edward Carnby** Sáb Sep 26, 2009 1:07 am

El deporte... Tiene la sensación de que ambos han pensado algo muy similar y que no se suele calificar como deporte, pero se queda en sensación y no en algo que manifieste hacia fuera. Va a dejar de secarse el pelo cuando ella termina de acercarse y se está quieto. Se deja acariciar el pelo, emitiendo casi un suave ronroneo ya que es algo que siempre le ha gustado, mientras la escucha:

- ¿ En seco...?- Se deja secar el pelo por ella, sintiendo la diferencia entre ella y él, pero tiene un motivo para no hacerlo así- ¿ Sabes por qué no me lo seco así?. Porque en seco al final acaba como le apetece... Pero me gusta llevarlo así, y no planteo cortármelo...

Hay algo que le llama la atención,y no puede callarse:

- Es curioso... Te he dado un beso de estos... Intensos, por llamarlos de alguna forma, y sigues aquí... Otra seguramente se hubiese marchado- Y sabe que es así, pero lo que su mirada indica es que le intriga y le interesa al mismo tiempo.

**Dita Alighieri** Sáb Sep 26, 2009 1:58 am

Esboza una sonrisa divertida ante la expresión y el suavísimo sonido que se le escapa a Eddy, que no habría sido capaz de oír si no fuera por la cercanía de sus cuerpos. Sus manos dejan de moverse cuando escucha su respuesta.

- Entonces nada. – Vuelve a dejar caer la toalla y sin necesidad de toalla, le revuelve el pelo en rápidos movimientos. – Ale, al natural. Y me parece perfecto que no te lo cortes, así se ve muy bien. – Lo dice pasándole los dedos por el pelo, cosa que le encantaba hacer y que le hicieran, peinando y despeinándolo.

Escucha el comentario del beso bajando sus manos por su nuca, dejando una reposar en su hombro y la otra todavía en el pelo. Lo mira con ambas cejas arqueadas y los ojos fijos en sus profundidades azules.

- ¿Debería? – Pero no le da tiempo a responder porque en un rápido movimiento se ha pegado a él, acercándole con la mano en la nuca. Un beso más largo, más intenso y más húmedo que el anterior. Completamente sin aliento se separa no sin antes darle un pequeño mordisco en el labio inferior, marca de la casa. Con una sonrisa de satisfacción vuelve a su posición original, recostada contra la encimera. - Si lo prefieres puedo irme…

**Edward Carnby** Sáb Sep 26, 2009 2:51 am

Es extraño que estén hablando de peluquería, pero la cosa le divierte y no está por la labor de terminarla... Deja que haga con su pelo lo que le plazca, escuchándola atentamente y estandod e acuerdo con ello, si le quedase mal no lo llevaría así.

Ante su pregunta va a responderle que no, pero en cuanto se quiere dar cuenta la tiene pegada a él y besándole con una intensidad que nada tiene que envidiar al que le ha dado antes. Es ás largo y se esfuerza en mantener el nivel, es más, lo consigue, y cuando ambos se separan ella no es la única que tiene que tomar aire, estremeciéndose ante el mordisco en el labio.

A´si,r ecostada contra la encimera y con esas palabras, no puede resistirse a avanzar hacia ella y enseñarle de ciertas formas que mejor que se quede...

Dos pitidos, seguidos de otros dos, anuncian un mensaje en su móvil. Si fuese sólo uno no le iportaría, pero cuando son dos...:

-Mierda...- Musita, parándose en el acto y sacando el móvil de su bolsillo. Como esperaba, Paul. Lee el mensaje una sola vez para saber que tiene que acudir, están en apuros y no es plan de dejarlos tirados. Con todo su pesa,r guarda el móvil- Creo que el que se marcha soy yo... Asuntos de trabajo.- Murmura con fastidio, rodando los ojos. Pero antes toma papel de la cocina y un boli del comedor y le deja su número- Toma, apuntátelo en el móvil... Y déjame debajo el tuyo, te llamaré cuando ocurra algo.. O si no será Daf la que se ponga en contacto contigo. Un placer, Dita, y nunca mejor dicho...- Se encamina hacia la salida de su casa, parándose en la puerta:

- Ah, y deja la puerta cerrada, vendrá en breves alguien a vigilar.- Y tras esto, desaparece de su casa.

**Dita Alighieri** Sáb Sep 26, 2009 4:16 am

Con una sonrisa de satisfacción observa a Eddy y como este se vuelve a acercar. Está cerrando los ojos a la espera de contacto. Pero un sonido hace que abra los ojos de golpe. El sonido de un móvil. Su cara refleja un ligero gesto de confusión.

Escucha todo lo que dice, sin interrumpir pues parecía importante y el chico iba con prisas. Simplemente se despide de él cuando se va con un ligero ‘Nos vemos’.

Se gira para mirar el papel donde ha escrito el chico su número. Lo coge y se dirige al comedor, donde ha dejado el bolso. Toma el móvil y apunta su número en la memoria. La vuelve a guardar y toma una pluma de su bolso, apunte el suyo y su nombre bajo el otro. Lo deja encima de la mesa, a la vista.

Toma el bolso, saca el mp4 y mientras lo enciende se dirige a la puerta, pero da media vuelta, toma otra chocolatina, con los auriculares ya puestos y sale, cerrando la puerta. Ya se encargaría de quemar todo el chocolate ingerido.

**Edward Carnby** Dom Sep 27, 2009 1:18 am

Lo tiene todo absolutamente preparado, de hecho lleva ya organizándolo todo desde hace varios días, que no es poco. Comprar el suministro de alcohol, preparar la casa quitando cosas inservibles, mover muebles...

Pero finalmente ya está. Justo nada más subir las escaleras se encuentra una pequeña mesa con dos de sus compañeros, los cobradores, porque una fiesta de barra libre se paga y quieren sacarse algún beneficio. Pasada la puerta las puertas laterales se encuentran cerradas, excepto la del cuarto de baño y la del cuarto de invitados, por llamarlo de alguna forma ya que por no haber no hay ni cama...

Pero el centro de la fiesta radica en el comedor. Los dos sofás se han colocado en la pared del fondo para aquellos que simplemente no aguanten, y en la otra pared se encuentra una pequeña mesa donde el Dj, un amigo suyo al que no ha tenido que pagar, se dispone a pinchar música toda la noche- Y en la cocina, una amplia mesa, alargada, se ha dispuesto con varios camareros, compañeros suyos también y que se turnarán con otros a lo largo de la noche, es decir, ahi está la barra.

En apenas una hora desde que la música empieza a sonar la casa va llenándose de gente para su saytisfacción. Parece un Hallooween anticipado y eso le gusta..Y su disfraz, casi obligado aunque en realidad le tentaba, destaca bastante.

va vestido de Pter Pan, sí, pero no el de mallas e infantil.. El pelo se mantiene inconfundible y como en una especie de tupé, pero el disfraz, de diversos tonos de verde, parece el de un Peter Pan más callejero y urbano. Vestido con unos pantalones crema que le vienen anchos, de una textura similar al cart´no, y una camiseta verde hierba en el que se alternan trozos de tela y otros de una especie de malla, especialmente por las mangas, destaca por encima de los disfraces que hay hasta el momento. Lleva una daga colgada en un cinturón, y si alguien mirase más detenidamente se daría cuenta de que es real y no una de juguete, y el característico sombrero de Peter lo lleva, pero curiosamente ladeado de forma que adquiere un aspecto más característico de él mismo que del personaje de Disney.

Cubata en mano va paseándose por la gente y disfrutando de la fiesta.

**Epiphany J. Murray** Dom Sep 27, 2009 1:30 am

Ha estado apunto de no ir, sí, ha hecho varias veces ademán de darse la vuelta y volver por el camino. Porque, sinceramente, por mucho que le haya prometido que iría, no sabe bien que pinta ahí, rodeada de desconocidos, y sabedora de que habrá mujeres mucho más... En fin, que ella no pinta demasiado en esa fiesta. Pero finalmente, fiel a su promesa, aquí está.

Y, como no, llevando un disfraz (o lo que ella misma se ha fabricado como intento de disfraz) de mariposa, consistente en un corto vestido celeste encorsetado con falda de cancán y a la espalda unas alas que combinan ese mismo color y el blanco, sin faltar la purpurina en estas y en sus brazos, escote y piernas. Para complementar, un antifaz también con forma amariposada de la misma tonalidad, una cinta que sujeta en un recogido su cabello azabache, y zapatos de tacón, de mucho tacón, a juego, intentando disimular su escasa estatura. Todo esto, aparte de fundirse con la palidez nívea de su piel y marcar su busto y sus curvas, hace que resalten mucho más sus enormes ojos, aunque sus labios, hoy pintados de rojo, no se quedan atrás.

Inspira aire y entra, pero al momento de hacerlo se plantea salir: podrá decir que ha estado, que no es mentira, pero que no le vio. Y así se libra de hacer el ridículo delante de tanta gente... Se queda parada, pensándoselo, mientras hace como que cuenta las grietas del techo para que si alguien pasa no piense que no saluda porque no le da la gana.

**Edward Carnby** Dom Sep 27, 2009 1:55 am

Se ventila el vaso en prácticamente cuatro tragos, tiene ganas de divertirse y se nota, aproximándose de nuevo a la barra y obteniendo bebida sin tener que esperar, es su casa y en parte su fiesta...

Vodka con limón en mano, vuelve a girar y observarlo todo, con la variación de múscia entre rock y otras canciones más de bailar y tipo discoteca para gusto de todos los asistentes...

Es entonces cuando ladea el rostro hacia el pasillo y se encuentra una figura vestida de azul. En un principio no la reconoce, aunque esos labios... Espera pacientemente a que deje de mirar el techo, y justo cuando ve sus ojos azules la reconoce del todo.

No se mueve del sitio, simplemente realiza un ademán con el vaso, como si fuese un brindis, y se queda ahi plantado.

**Jane C. Jaffe** Dom Sep 27, 2009 2:03 am

Camina por las calles de R&B, con un toque un tanto salvaje para su persona, más de lo normal. En una de las casa se oye jaleo, por lo que no duda que es hay donde se celebra la fiesta de disfraces que Eddy le había mencionado. por lo visto él era el anfitrión, por lo que no duda en ir a ver como era, y de paso, como no, a ver a Eddy, que hacia tiempo que no veía la muchacho.

Con forme se va acercando, la música y los gritos de la gente se hacen más fuertes, y por fin, pasa a dentro de la casa tímidamente. Se queda perpleja con algunos disfraces, siendo bastante elaborados, y mira el suyo. Su disfraz era un conjunto de tiras de cuero marrón colocadas estrategicamente para tapar lo necesario de su cuerpo, dejando libre espalda, tripa y escote. Sus piernas no estaban tampoco tapadas, tan solo por una tela, a modo de falda en medio. Sus pies, adornados con botas marrones a conjunto, complementaban su precioso disfraz. Su pelo revulto con un par de trenzas, y su piel completamente pintada a modo de tatuajes hacian que parecida un verdadera querrera. En verdad, iba de eso: de una guerrera celta.

El disfraz no tapaba la cicatriz reciente que se adivinaba en su piel, en su muslo izquierdo, ni tampoco tapaba su tatuaje lumbar, dejándolo a la vista de todos, pero en verdad no le importaba, le gustaba lucirlo.

Mira en unos segundos si conocía a alguien, pero no divisaba a nadie concido, ni si quiera al propio Eddy, por lo que se interna entre la gente, intentando no darse cuenta de las miradas que le lanzaba la gente. Sería la cantidad de gente metida en aquel lugar.

**Epiphany J. Murray** Dom Sep 27, 2009 2:04 am

No sabe cuanto tiempo está mirando al techo hasta que la sensación de que está siendo observada y evaluada comienza a ser insoportable y baja la mirada para buscar con ella a quien quiera que sea el espía, maldiciéndose y alegrándose interiormente a partes iguales al reconocerle, y sonriendo al ver su disfraz, que sin duda alguna le da un aspecto bastante curioso y divertido.

Y ya, de perdidos al río, decide acercarse, caminando con sorprendente gracilidad pese a los taconazos que lleva, provocando que sus caderas se muevan insinuantemente debido a esto aunque ella ni se de cuenta. Al llegar hasta él, como no sabe como cojones debe saludarle, si con dos besos en la mejilla, uno en los labios, un abrazo, o vete tú a saber qué, sencillamente se queda parada, sin borrar la sonrisa, clavando sus ojos celestes tan potenciados por el antifaz en los de él.

-Bonita casa -Dice a modo de saludo- Y bonito disfraz, y además, irónico... -Comenta en tono casual, robándole la copa y dando un trago para volver a depositársela en la mano, sin hacer nada más. Tampoco se percata de que alguien más ha llegado ni rpesta atención al resto de la gente, no cree ir a reconocer a muchos.

**Edward Carnby** Dom Sep 27, 2009 2:11 am

Espera a que se acerque tranquilamente y echando miradas a su alrededor, de momento la cosa va bien, el problema será dentro de unas horas, con mucho alcohol en cuerpo y discusiones... Pero bueno, una fiesta sin alguna pelea no era fiesta, y menos en este barrio, así que con eso ya contaba.

Cuando sale de sus cavilaciones ya la tiene enfrente. Él sí sabe como saludarla y le da un beso en cada mejilla, de forma informal pero al mismo tiempo de una forma más cercana que quedarse parado. Echa otro vistazo a su alrededor y sonríe:

- Sí, bueno... Quitar la mierda hace milagros- Comenta en voz alta para hacerse oír por encima de la música, enarcando una ceja ante su piropo- ¿ Irónico por qué?. El tuyo tampoco está nada mal, estás que deslumbras- Le es sincero y se nota en su voz, bufando cuando le roba el vaso momentáneamente- Eh, eh, que ahi tienes la barra cielo...- En ese momento se percata de la entrada de otra chica que conoce, y justo cuando pasa por su lado posa una mano en su hombro:

- Eyy, que te pasas de largo... Jane, Epi- Las presenta con una media sonrisa divertida.

Contenido patrocinado