Re: Tras la Fábrica Abandonada

**Gabriel "Leir" Dawson** Lun Ago 03, 2009 1:54 am

Abrió los ojos al día siguiente, ligeramente molesto por la tenue claridad que se adivinaba a través de la cortina de la ventana. Por la inclinación del sol, debían ser pasada slas 12 de la mañana. Leirbag estaba bocarriba sobre su cama, enredado con el nórdico, casi despatarrado, como si acabase de caerse desde un 6º piso... y sobre su pecho, abrazado como temiendo escaparse, dormía plácidamente Aidan, demasiado agotado después de un noche entera sin parar.

El joven sonrió, y se estiró levemente, sintiendo el cuerpo del otro chico medio echado contra el suyo, igual que un felino, y suspiró, dejando caer los brazos a ambos lados de la almohada. No había sido una mala noche, no...

- Yuuuuju... vamos, Bello Durmiente, despiertaaaa... - canturreó con su voz algo ronca, afonía mañanaera, mientras le revolvía levemente el pelo de la cabeza.

**Aidan Livermoore** Lun Ago 03, 2009 2:02 am

*Por una vez, había dormido plácidamente, sin ninguna pesadilla. Ni siquiera me acordaba de haber soñado, y sospechaba que se debía al agotamiento. Pensar en el motivo de tanto cansancio sonrojaría mis mejillas si no fuera porque aun estoy demasiado adormilado como para avergonzarme de nada. Solo oigo una voz que me medio despierta y yo me remuevo, notando una mano despeinándome*

-Mmmmm…..

*Esa es la gran contestación del año, y me quedo tan feliz con esa respuesta hasta que mi mente va, poco a poco, dándose cuenta de la situación exacta en la que me encuentro. Primero, en casa de Gabriel, antes conocido como Ángel caído. Segundo, desnudo, aunque tal cosa no tiene importancia tras la noche pasada…….Ejem, tercero, con un lio mental que tardare semanas, o meses, o años, o milenios en solucionar.

Me remuevo levemente antes de apartarme un poco de Gabriel, desperezándome sin ocupar demasiado espacio en hacerlo y mirar al chico unos instantes*

-….Buenos días…..Mmm….que…que hora es…?

**Gabriel "Leir" Dawson** Lun Ago 03, 2009 2:08 am

- Hmmm... la hora de desayunar según mi estómago - contestó Leirbag estirádnose de nuevo, antes de dar una voltereta en la cama y levantarse, dejando que la luz iluminase su cuerpo desnudo, mientras se ponía unos pantalones cualquiera de los que estaban amontonados por ahí. En su mano permanecía la marca rosada del corte del wakizashi, formando otra cicatriz que seguramente el chico añadiría a su colección - Hmmm... ¿qué tal te llevas con las cocinas? Esque la última vez que intenté hacer tostadas casi quemo al casa, ¿sabes? - preguntó saliendo de la habitación.

Se oyeron ruidos en el baño, y al rato el joven volvió, sacudiéndose el pelo mojado, y volviéndose a tirar en la cama, junto a Aidan.

- ¿Y bien, qué te apetece desayunar?

**Aidan Livermoore** Lun Ago 03, 2009 3:40 am

-….segun tu estomago….

*También según el mio, pero eso no aclara ni por asomo la hora que es. Por fortuna, hoy no tenia clase, porque si no ya me estoy viendo con una queja bastante gorda por parte del director….Me entran escalofríos solo de pensarlo..

Gabriel se levanta, vistiéndose antes de que me de tiempo a apartar la timida mirada que lanzo sobre el, tapándome un poco con el nordico. Mientras el esta en el baño aprovecho para vestirme, pero para mi desgracia, no encuentro la camisa por ningun lado, y no me atrevo a mirar debajo de la cama por temor a lo que me encontrare.

Me quedo sentado en el colchon hasta que vuelve el chico*

-….Bueno, se defenderme con la cocina….algo sencillo se preparar…..Que tienes en la nevera?

**Gabriel "Leir" Dawson** Lun Ago 03, 2009 10:07 am

Leir arrugó el morro, pensando con la mirada ladeada perdida en alguna infinitud de su mente.

- Hmm... en la nevera... no se... - desvió la mirada hacia la espalda al descubierto de Aidan, recorrida por cicatrices y las heridas aún enrojecidas, sin ninguna marca que pudiera delatar la larga y agotadora sesión de aquella noche - Pero... justo aquí tengo un manjar... -el chico alzó el brazo sin que Aidan le viera, y tiró de él hacia atrás, hasta tumbarle en la cama de nuevo, quedando él encima del chico - ... de lo más delicioso - ronroneó con su media sonrisa sesgada y su mirada rebosante de picardía - Dime, Aidan... ¿te quedaste... satisfecho... con lo de ayer? - pasó la punta de la nariz por su oreja, dejando que él notase, de nuevo, su aliento sobre la piel - ¿Te acuerdas de... cada gemido, cada grito... que dabas hundido en... tu propio... placer?

**Aidan Livermoore** Lun Ago 03, 2009 10:25 am

*Aun busco un poco con la mirada a ver si encuentro mi camisa por el suelo, pero parecen habérsela llevado los famosos duendes de las llaves, mientras presto atención al tema del desayuno. A pesar de que recién despertado no acostumbro a tener hambre, debo de llevar muchas horas durmiendo y…..bueno….gastando energía, porque estoy bastante hambriento.

Oh, si no tiene nada en la nevera puede que….

De pronto él vuelve a tumbarse encima de mí, sintiendo el colchón a mis espaldas, notando en la parte descubierta de mi cuerpo el tacto cálido del suyo, mientras su rostro se encuentra demasiado cercano al mío como para que pueda sentirme cómodo, aunque no me moleste.

Parece que el deporte nacional del modulo de Gabriel es hacerme enrojecer, porque lo ha conseguido, y con creces. Solo recordar lo que hicimos anoche, lo que llegue hacer yo….los gemidos que…solté, y…Aaagh, más sonrojo, más sonrojo*

-M-me acuerdo….muy bien….Y…s-si…*aparto la mirada de sus ojos, sintiendo su aliento en mi oreja, para poder hablar de modo coherente*…quede….quede satisfecho……pe-pero….y tu?

**Gabriel "Leir" Dawson** Lun Ago 03, 2009 11:16 am

Leirbag sonrió y sacó casi con cierta perversión la lengua entre sus labios, acercándola a la piel de Adam, sin llegar a tocarle, sólo asustándole con la expectación.
Se rió de nuevo por lo bajo.
Y de pronto soltó un chillido casi de chica.

- ¡Kyaaaaaaaaaaaaaaaa! ¡Qué mono estás cuando te sonrojas! - exclamó de pronto, abrazándole como a un peluche.

Riéndose casi a carcajadas, con aquella picardía en la mirada, comenzó a hacerle cosquillas a Aidan, acariciando con leves golpes de sus dedos sus costados, esquivando sus intentos de zafarse como un animalilo enjaulado.
Hasta que, de nuevo, quedó echado sobre él, sujetándole las manos.

- Me alegra saberlo... - susurró, recobrando la seriedad tan pronto como la había perdido, separándose levemente - ¿Yo? ¡Yo siempre tengo ganas de más! - dijo quitándose de encima de él al fin, y estirándose por tercera vez aquella mañana - Hmmm, si quieres intentar asaltar mi nevera, puedes, pero si oyes un gruñido, mejor ciérrala.

**Aidan Livermoore** Lun Ago 03, 2009 11:29 am

*Espero a que me acaricie con su lengua del modo que ha estado utilizando durante toda la noche, sin tener muy claro si eso me cohíbe más o todo lo contrario, pero al final parece que simplemente quería jugar un poco precisamente con esa indecisión mental.

Daria un salto si no fuera porque el esta encima mio cuando lanza un gritito de chica histérica, quedando con los ojos muy abiertos por la sorpresa. Y claro, entonces viene el juego sucio, empezándome a hacer cosquillas*

-Agh! Para, para, para, para!

*Claro que, evidentemente, me pongo a reir, a pesar de mis intentos de que pare y me deje de provocar una reacción física casi histérica. Claro que me divierto, casi parece como si el refugio que ha conseguido montarme Gabriel fuera a ser eterno y no desaparecer por la mañana, aunque por lo visto es mas de mediodía. Ya ha sido de por si agradable despertarse con alguien al lado, lo es más descubrir que ese alguien no va salir por la puerta, o en mi caso, echarme, si no que le dan ganas de seguir conmigo, aunque sea haciendo el tonto.

Mantiene mis manos sujetas, otra vez muy cercano a mi, hablándome con seriedad. Quizás algún día me acostumbre a sus cambios de humor. Quizás, algún día.

Cuando me suelta me estiro yo también, vengándome de improvisto y de forma sorprendente pasándole una mano por el pelo y desordenándoselo, levantándome después desistiendo de encontrar mi ropa a menos que se lo pida. Pongo mala cara en cuanto menciona vida inteligente en la nevera*

-….Voy a ver que hay dentro…..

*Le medio sonrío y voy esquivando las cosas por el suelo hasta llegar a la cocina, donde consigo abrir la nevera con cuidado, esperándome encontrar a un duende congelado. Lo que encuentro me sorprende mas y es….casi nada. Salvo algunas cajas de cartón medio vacías de comida rápida y algunos tapers sucios y también vacios, solo hay un tetrabrik de leche por la mitad, otro vacio que por alguna razón desconocida guardo dentro de la nevera otra vez y dos huevos, aunque no estoy seguro de su estado….*

-….Cuando….cuando compraste los huevos…? No, cuando fue la ultima vez que fuiste a comprar….?

**Gabriel "Leir" Dawson** Lun Ago 03, 2009 11:49 am

Lierbag se sacudió como un perro cuando le desordenó el pelo húmedo, y le observó con su media sonrisa sesgada y aquellos ojos verdeazules, muy lejos de resultar frívolos o insensibles. Dejó que Aidan fuera a la cocina, y estando él intentando hurgar en la nevera, Leirbag se levantó, notando bajo sus pies el tacto de una camisa que, en seguida supuso, pertenecía a Aidan.

Sonrió con picardía, mientras levantaba el colchón de cama, cuidándose de que Aidan no le viera, y sacara, de debajo de los libros, un maletín del que sacó un pequeño fajo de billetes que se encargó de meter en el bolsillo de la camisa del chico, antes de vovler a semienterrarla entre la ropa del suelo, esocnder de nuevo el maletín y bajar al cama.

- ¿Eh? ¿El qué? ¿A comprar? Ehm... - salió a la cocina con cara de inocencia, rascándose la barbilla imberbe con la mirada perdida - ... cre oque hace... un mes... quizá dos... no lo se - se encojió de hombros con gesto despreocupado - ¿Por qué voy a arriesgar mi vida cocinando si puedo pedir que me traigan hecha la comida? Es más fácil y menos estresante...

**Aidan Livermoore** Lun Ago 03, 2009 12:12 pm

-….Un mes…..Y esa comida lleva aquí un mes…..Tu no tienes duendes, tienes los fantasmas de los pollos no-natos que nunca fueron comidos y quieren ser vengados…..

*Suspiro, cogiendo dichos huevos y mirándolos un poco. Ahora que lo pensaba, alguien le había hecho a Gabriel unas croquetas, así que quizás también le había puesto un poco de comida dentro de la nevera….con suerte quizás los huevos estaban mas o menos frescos.

Los rompo y los dejo caer en un plato, con cuidado extremo, como si llevasen nitroglicerina dentro. Los miro, los remiro, observo su color y su olor y deduzco que son más o menos comestibles. Y haciendo gala de una habilidad culinaria única, realizo el único plato que se hacer con dicho alimento, huevos revueltos, empezando a batirlos.

De pronto me siento algo ridículo cocinando en la cocina de Gabriel, pero prefiero alimentarme a mi, y al el de paso con lo único que queda fresco en la casa que dejar que se muera de asco congelado*

-…entonces pide que te lleven la compra a casa, pero por lo menos deberías tener algo con que alimentar tu estomago por la mañana….ni que fuera un trozo de pan….No, espera, no me contestes con un “Ya tengo pan” porque aventuro que es de hace tres años, y estará como mínimo verde….

*Dejo de batir y miro al chico*

-….Donde tienes los utensilios de cocina…?......si es que tienes….

**Gabriel "Leir" Dawson** Lun Ago 03, 2009 12:27 pm

Leirbag se rió con ganas ante el comentario de Aidan, y se restregó los ojso como si quisiera limpiarse las lagrimillas.

- ¡Oye! ¡Esa es buena! ¡Dentro de poco te parecerás a mi, joven padawan...! - se quedó pnesando un rato - Hmmm... no, mejor reza porque eso no pase - se movió por la cocina, olisqueando a cierta distancia de Aidan, observando lo que hacía con curiosidad, ocmo si para él fuera lo más interesante del mundo - Hmm... ¿"utensilios"? Ehm, pues... - señaló uno de los armarios - Ese armario no lo he abierto nunca, porque siempre he tenido la sospecha de que era la guardia de los duendes. Pero prueba, quién sabe, lo mismo ahí está lo que necesitas - se encogió de hombros de nuevo con media sonrisa sesgada, antes de meterse en el baño, para darse una ducha fría, dejando a Aidan sólo ante la jungla que era su cocina.

**Aidan Livermoore** Lun Ago 03, 2009 12:33 pm

-Pequeño padawan…?....Claro…emm….Si, utensilios, unos extraños objetos que se utilizan para cocinar cosas….

*Le sonrío, siguiendo en el tono de broma y buen humor que ha habido desde que me ha despertado. Suspiro cuando menciona el armario, dejando que se vaya al baño*

-Eso, huye….*murmuro para mi mismo, acercándome al dicho armario, dejando el plato con los huevos batidos en la encimera.

Solo abrir la puertecita del armario, un poco mas alta que mi cabeza, una serie de ollas, cazuelas y otras cosas me caen encima. Consigo apartarme, pero no logro esquivar las primeras dos o tres, dándome más sobresalto que dolor.

Caen al suelo creando un estruendo interesante y rápidamente las voy recogiendo, dejándolas encima de la mesa de la cocina, parpadeando aun por la sorpresa*

-…Malditos duendes….

*Me doy cuenta de lo que he dicho y me rio por lo bajo, cogiendo de entre todos los trastos, que hay de nuevos, de viejos y de rotos, el que me interesa, encendiendo el fuego y vertiendo los huevos*

**Gabriel "Leir" Dawson** Lun Ago 03, 2009 12:41 pm

El estruendo de las cacerolas cayendo sobre, seguramente, la sesera de Aidan hizo que Leirbag se doblara de la risa en la ducha. Cuando salió, aún con la risilla tonta en los labios, el pelo mojado hacia abajo, dándole casi un aire angelical, y la toalla enrollada en la cintura, señaló al chico que cocinaba con un brazo redeándose el vientre, como si le doliera de reírse.

- ¿Lo ves, lo ves? Te ha saltado la trampa anti-visitas-no-deseadas/carteros-comerciales... Estos duendes, nunca sabes con lo que te van a salir - de pronto, olisquó el aire, como un cánido, y se acercó, sinuso, hasta la sartén que estaba en el fuego - ¡Coño! ¡Si funciona y todo! Y yo que pensaba que estas cosas eran como frisbies de plomo... - se dió un golpe en la frente - Hm... ¿no crees que es un poco... OBVIO... el hecho de que no-se-cocinar? - no parecía en absoluto avergonzado o preocupado por ese hecho casi sustancial para quien vive solo - Si lo se, tan bueno en la cama y tan patoso para vivir... qué lástima de personaje - dijo poniendo tono melodramático en su voz, hablando de sí mismo.

**Aidan Livermoore** Lun Ago 03, 2009 12:51 pm

-La trampa anti-visitas-no-deseadas/carteros-comerciales...? *me rio por lo bajo otra vez, a media voz* Espero no ser una visita no deseada….

*Aunque mi tono de voz sigue siendo pacíficamente alegre, tengo el leve temor de que llegue a aburrir a Gabriel. Siendo como parece ser, y como ha demostrado ser la pasada noche, no me despreciaría, pero él es, según he comprobado, una persona de humor bastante extraño y reacciones aun más sorprendentes. Por lo contrario, yo soy, en ese y cualquier sentido, corriente.

Soy un experto creándome dudas inútiles y absurdas, y hoy no es una exepción. Tengo la sensación de querer dar todo lo mejor de mi mismo para complacer a Gabriel y que le agrade mi compañía, pero al mismo tiempo no se que mostrarle de mi.

Aparto la paranoia mental que me estoy montando cuando se acerca olisqueando*

-Si consigues encontrar dos platos, creo que nos lo podremos comer y todo….

*Me rio por o bajo cuando comenta sus pocas habilidades en la cocina, haciendo que me gire y entonces me doy cuenta de su aspecto. Completa y radicalmente distinto a como estaba en el Lust, una diferencia abismal. EL que me encontré ayer en el local era, sin duda alguna, sensual y con aires de misterio que le hacían atrayente. Pero, por alguna razón desconocida, lo prefiero asi….Es como si pudiera ver un resquicio de la mente de Gabriel, y tener ese privilegio compensara cualquier cosa. Parpadeo varias veces antes de que piense que me he quedado mirándole como un idiota, cosa que no deja de ser cierta*

-….Bueno, no eres tan inepto para vivir si alguien te prepara voluntariamente comida de tanto en tanto….

**Gabriel "Leir" Dawson** Lun Ago 03, 2009 12:59 pm

- Ah, ni tú lo eres ni yo lo soy. Esque ellos estaban aquí primero, ¿sabes? Entonces claro, se vengan de nosotros porque dicen que les invadimos... tsss, pues ellos no son los que pagan el alquiler - dijo con cara de ofuscación mientras abriá el lavaplatos, sorprendentemente limpio, y sacaba dos platos y unos cubiertos de su interior, dejándolos sobre la encimera, al tiempo que se colocaba detrás de Aidan, pegando su pecho a la espalda del chico, volviendo a dejar la nariz detrás de su nuca - Hmmm... ¿tú te calificarías como "alguien que me prepararía la comida voluntariamente de tanto en tanto? - las manos de Liebrag descendieron por sus costados, saltando sus cicatrices, hasta la línea del pantalón.

**Aidan Livermoore** Lun Ago 03, 2009 5:22 pm

-Claro, claro, les has invadido el maravilloso bosque frondoso con tu enorme mansión…..

*No se quien le dio la idea de que perdía las cosas por los duendes y no por el caótico orden con el que clasifica su casa, pero he de reconocer que da para divertirse un rato largo. Aunque claro, el tema de las llaves me hizo dudar durante unos instantes sobre si realmente era un duende o que….Creo que esta casa me hace pensar de manera irracional….

Veo sorprendido como dos platos limpios son puestos delante de mis narices, sin que me pueda creer que ha sido el quien los ha lavado. Puede que la observación sea injusta, pero si cuida la cocina como cuida su ropa, no sabría yo que decir…

Pongo los huevos revueltos en ambos platos, cerrando el fuego y dejando la paella por ahí, suponiendo que ya la pondré en la pica más tarde. Siento la respiración de Gabriel cerca de mi nuca, con su pecho pegado a mi espalda, ocultando con su cuerpo las cicatrices. Puede que en otro momento llegue a pensar en la metáfora, pero ahora estoy ocupado concentrándome en no dejar caer los platos, notando sus manos en mis costados, bajando lentamente*

-….Eeh….si…si no mueres envenenado por estos…estos huevos, puede que pueda…prepararte algo mas…

**Gabriel "Leir" Dawson** Lun Ago 03, 2009 5:49 pm

- Exaaaaaaaaaaacto... - dijo con un tonillo agudo, respondiendo a su comentario.

Se quedó pegado a aél, con las manos peligrosamente colocadas sobre los huesos de su cintura, sugerentes, como una leve amenaza de lo que se proponía su mente. O tal vez no. Precisamente esa incertidumbre era lo que le aprecía tan... deseable.

- Envenenado por estos... no creo... pero por otros... - la mano de Leirbag se deslizó, atrevida, por la entrepierna de Aidan en una caricia que parecía sobrepsar el hecho de tener ropa en medio - Si, yo creo... que podrías saciar mi hambre... de otra forma... Peeeeeeeeeeero... - recuperó el tono jovial de repente, como si en ningún momento se hubiera acercado a él de aquella forma tan siniestra a la vez que sensual - ... primero tienen que pasar la prueba de los tenedores, ¿no? ¡Vamos a comer!

Feliz como una lombriz, silbando, Leirbag cogió uno de los platos, y se sentó en la mesa cruzando las piernas bajo la toalla húmeda, y cogió el tenedor con dos dedos de la mano izquierda, cogiendo un poco y llevándoselo a la boca.

- ¡MMMMMMMMMMMMMMMMMHH! Seeeñor... - dijo poniendo los ojso casi en blanco - Dios existe y dec idió que supieras cocinar, ¡sí señor!

**Aidan Livermoore** Lun Ago 03, 2009 5:59 pm

*Oh, claro, debería haber supuesto que le juego de palabras era fácil con la comida que estoy haciendo, pero presuponer o esperar nada con Gabriel parece ser cada vez más ridículo. Con él un ser humano medio solo puede dejarse llevar, cosa que a mi me resulta considerablemente compleja. Sobretodo porque sus manos no se están quietas y me causan la contrastada sensación de avergonzamiento y placer, lo cual no hace si no confundirme. Sobretodo porque recuerdo lo que pasó anoche.

Me pregunto si esto lo hace porque le divierte confundirme, o simplemente porque es lo que le sale de hacer, sin pensarselo, de forma impulsiva.....
Aunque tambien existe la opcion de que lo haga de forma impulsiva porque le divierte confundirme

De pronto se separa de mi, dejándome con la duda de si hubiese seguido su juego o me hubiese cohibido más, deslizándose hacia la mesa con uno de los platos. Observo como devora el primer bocado y yo me acerco hasta la mesa con una sonrisa timida de agradecimiento hacia su especie de halago*

-Bueno….si le pusieras sal….quizas te gustaba mas y todo…

**Gabriel "Leir" Dawson** Lun Ago 03, 2009 6:09 pm

- Uy sal... no la he vuelto a ver desde que tiré el bote encima de hombro la última vez que la derramé en la mesa... - comentó como si tal cosa, degustando aquel sencillo desayuno como si fuera ambrosía divina, poniendo caras casi orgásmicas ante el sabor de algo que, para variar, no recordaba al plástico del envoltorio...

Señaló a Aidan con el tenedor y le dijo:

- Oye, si amenazas a los duendes lo mismo aparece tu camisa, no vas a ir por la calle así, ¿no? Bueno, yo no pondría ninguna pega, ya sabes... - rió por lo bajo - Por cierto, qué día es hoy?

**Aidan Livermoore** Lun Ago 03, 2009 6:16 pm

-....Claro, que mejor utilización para la sal que la de tirarla por encima del hombro….*me rio por lo bajo, pinchando un trozo del desayuno y comiéndomelo*….pero la tradición dice que sea una pizca, no todo el pote….

*No puedo evitar reírme ante las caras que pone ante el plato, exageradas sin duda ya que se me ha quemado un poco, no tiene sal, y le faltaban ingredientes. Debe de comer muy mal si aprecia mi cocina, realmente, ya que por lo general, me alimento con cuatro recetas y nada mas.

Alzo la cabeza del plato, mirándole unos instantes largos, escuchándole, antes de volver a mirar mi plato*

-…Si, la verdad es que no encuentro mi camisa….Tendre que pedírsela a los duendes, pero creo que ya no te quedan galletas….

*Le sonrio de nuevo antes de pensar un poco en que dia nos encontramos, preguntándome yo de nuevo que hora es*

-…Si no he dormido un dia entero, creo que es lunes…..porque?

**Gabriel "Leir" Dawson** Lun Ago 03, 2009 7:28 pm

- Ish, me han timado entonces... - dijo con cara de indignación, mientras terminaba con los huevos en un santiamén. - Hm, pues no. Pero a mí las galletas no me funcionaron, acojónales un poco antes de irte, ¿si? Aunque me ha parecido verla por algún rincón de la habitación ahora que hago memoria...

Leirbag se pasó la mano por el pelo, con gesto despreocupado.

- Lunes, lunes, sí... lun... - de pronto se interrumpió, poniendo cara de sorpresa, y acto seguido salió pitando para la habitación - ¡AAAAAGH! ¡¡LEGO TARDE AL TRABAJO, MIERDA!!

Se metió en el cuarto a todo trapo, se oyeron golpes y portazos durante varios minutos, y finalmente salió vestido con los pantalones que llevaba puestos antes, el cinturón y el wakizashi, el pelo rubio revuelto, las botas de correas, los mitones a medio abrochar y una chaqueta de cuero negro sin mangas y sin botones. Se colgó una cartera llena de Dios sabía qué al hombro, y se paró a la pata coja en la puerta, abrochándose las hebillas.

- Esconde las llaves bajo la alfombrilla cuando te vayas, ¿quieres? Intenta que los duendes no te vean, ¿eh, grillo? Si no me tocará dormir fuera... - se terminó de colocar las botas, y se despidió de él con un gesto de la mano y guiñándoel un ojo - ¡Nos veremos, Aidan! - y sin más explicaciones, salió corriendo de casa, dejando la puerta abierta.

Si Aidan se asomaba por la ventana podría ver al chico corriendo por las calles y las casas ruinosas haciendo una auténtica exhibición de parkour a toda carrera. Y si se fijaba lo suficiente la vista, el chico sonreía. Su media sonrisa autoconfiada, seguramente, porque se estaría imaginando la cara de Aidan al salir de su módulo, y encontrarse su regalito en el bolsillo de la camisa.

**Aidan Livermoore** Mar Ago 04, 2009 10:06 am

-Mmmm…algún rincón de la habitación, dices….? Entonces la buscare mejor….Espero no tener que asustar a ningún duende porque no creo que se me de bien…

*Doy un respingo cuando se acuerda de que la semana acaba de empezar y que estamos a lunes, levantándose de golpe y dirigiéndose a su cuarto para, supongo, vestirse. Claro que debía haber pensado que el trabajaría todos los días de la semana, pero acostumbrado a librar los lunes hasta las clases de la tarde, ni se me había pasado por la cabeza. Termino de desayunar mientras lo veo arreglarse a una velocidad envidiable sin duda, aunque me parece que he oído algo romperse al caer al suelo. O a lo mejor a sido el mismo que ha caído, ni idea.

Sale de la habitación a toda prisa, con su atuendo habitual y borrada la expresión casi de inocencia traviesa que tenía antes, aunque el cambio no me parece desagradable. Mientras se coloca las botas me da indicaciones de lo que debo hacer para cerrar la casa. Me quedo bastante sorprendido por ello, ya que se ha de tener una confianza considerable en alguien para dejarle solo en una casa, pero deduzco que a Gabriel ni siquiera se le ha pasado por la cabeza que yo pudiera hacerle nada a su habitáculo, lo cual no deja de ser agradable de pensar.

Me acerco a cerrar la puerta, pero cuando lo hago, lo veo correr por el descampado con una habilidad que solo había creído posible en los dobles de las películas enganchados a arneses. Ni que fuera el nieto de spiderman….Supongo que es más rápido atajar por donde él hace, pero con lo seguro que parece el camino principal….No soy capaz de fijarme mucho más en el cuando desaparece por las calles, pero me había parecido ver su expresión divertida curvando sus labios.

Cierro la puerta con cuidado, encontrando súbitamente silenciosa y fría la casa, aunque por todas partes quedan rastros de él. Al igual de lo que suele ocurrirme cuando vuelvo a la acostumbrada pero ahora relativa soledad, ver la casa sin él me produce una sensación triste. Pero me dejo de tonterías y decido que tampoco tiene mucho sentido quedarme aquí encantado esperando su regreso, ya que tengo que ir a mi casa y corregir algún examen….Suspiro, recogiendo los platos y lavándolos sin mucha gracia en la pica, al igual que la paella que he utilizado. Estoy a punto de romper uno de los platos pero consigo que se quede quieto en mis manos antes de tocar el suelo, con lo cual no destruyo parte de la bajilla de Gabriel.

Voy hacia su habitación, intentando encontrar la camisa que….Ah! Estaba aquí, escondida en un rincón…que curioso, diría que antes había mirado por aquí…bueno, seguramente al moverse Gabriel ha removido las cosas y por eso ha aparecido. Me la pongo bastante deprisa, notándome mucho mas cómodo cubierto con ella, y tras recoger mis cosas y las llaves, salgo de allí.

En la puerta de entrada, tengo la sensación de hacer el tonto cuando miro a ambos lados para ver si no hay duendes, pero me ha pedido que tenga cuidado. Las pongo debajo del felpudo, escondidas de la vista de cualquiera y empiezo a andar con relativa tranquilidad, esperando que este sea un barrio de inmerecida fama criminal.

Mientras ando, ya bastante alejado, siento un peso que antes no notaba en el bolsillo de la camisa. Me llevo la mano allí, descrubiendo de pronto un fajo de billetes que ya de entrada tienen aspecto reverencial. Me quedo sin habla, escondiéndolos de golpe en el bolsillo del pantalón, quedándome quieto.

Como diablos…?.....Gabriel? Pe-pero! Porque? Y viviendo el en un lugar asi, porque me regala tanto dinero? Y si son sus ahorros? Si, tengo que devolvérselos…..Pero siendo como el es….quizas se ofende….Ya se, los guardare en algun lugar, como si fueran para emergencias, pero no los tocare a menos que me vaya la vida en ello….pero cuando dinero debe de haber dentro?!

Suspiro, sin saber muy bien que hacer con el dinero, aunque siempre fuera algo justo económicamente. Lo guardaría, no lo tocaría y quizás podría devolvérselo de alguna forma….O compensarle, al menos….

Sigo andando hasta salir de allí*

**Tara Mayfair** Mar Ago 25, 2009 12:36 pm

Llega a al modulo conduciendo de una forma temeraria pese a no llevar casco. Sabe que el haber tirado las pastillas no era lo mas conveniente para la salud de Leirbag, pero nunca ha confiado demasiado en los psiquiatras y no considera que las drogas sean la mejor cura para un alma enferma como la de Leirbag. Para esa enfermedad solo conoce una cura y es el cariño.

Como si entrase en su casa abre la puerta del modulo que no parece ni el mismo con todo colocado en su sitio, le ha comprado una cama nueva a Leirbag, de esas cuyo somier es en realidad un armario y mesillas de noche. Entre la cama y las mesillas ha organizado toda la ropa. Con la misma famirialidad abre la despensa y saca una tetera para microondas y un pequeño taper con té, parece como si hubiera pasado demasiadas horas allí esperando. Echa el te en la tetera con agua mientras prepara el agua.

No le ha dirigido la palabra a leir desde que han llegado, es como si intentase no pensar en la falta de Aidan, como si intentase mantener una fuerza que ahora le falta.

Apoya las manos sobre la encimera de la cocina, por sus ojos resbalan las primeras lagrimas.

-No debi dejarle marchar...

**Gabriel "Leir" Dawson** Mar Ago 25, 2009 3:01 pm

Leirbag abrió bastante los ojos al entrar en su casa y verla casi irreconocible, ordenada y con icertas mejoras importantes.

- Uf, te has aburrido mucho en mi ausencia, ¿verdad hadita? - le preguntó Leirbag, de forma obviamente retórica. - Ya vendrán los duendes a hacer de las suyas, ya...

Por su forma de empezar a husmear en al casa y observar todo detenidamente con curiosidad renovada, como si no viviera allí, se notaba que tampoco esperaba respuesta.

Pasó un rato, en el que Leirbag dejó su ropa sobre la cama con cuidado relativo, y aprovechó para meterse en la ducha y darse un merecido baño en unos pocos minutos, mientras Tara preparaba el agua en la tetera.
Salió con una toalla oscura rodeándole la cintura y el pelo rubio oscurecido por la humedad, goteando por su sienes. Escuchó las palabras ahogadas de Tara. Su semblante se volvió serio, casi humano, en contraste con su mirada pícara y su media sonrisa perversa habitual.
Se acercó a ella por detrás, sin preocuparle mucho el hecho de que él mismo estaba aún algo mojado, y le pasó un brazo por la cintura, mientrsa hundía la nariz en su pelo oscuro.

- Tampoco debías impedírselo - le susurró al oído con su voz grave - Es una batalla que Aidan debe librar solo. Nosotros sólo podemos ayudarle... - hizo descender su otra mano hasta la muñeca de Tara, hasta acariciar la pulsera que les regaló a ella y a Aidan - ... y echarle una manita si se puede... - el brazo de Leirbag presentaba cicatrices de cortes crecientes, como si hubiera intentando usarlo de escudo contra algún tipo de arma cortante en una pelea.

**Tara Mayfair** Mar Ago 25, 2009 4:04 pm

Se estremece ante el contacto de su piel humeda y siente un escalofrio cuando la abraza por la cintura. Es como si con ese gesto tan nimio consiga hacerla sentir segura de nuevo... Dibuja en sus labios una sonrisa cansada, pero una sonrisa a fin de cuentas, aferrandose a la idea de que todo saldra bien.

Sus dedos acarician de forma casual las cicatrices que cubren ahora su brazo, recorriendo con suavidad su piel marcaba, terminando por tomar delicada su brazo y acercarlo al rostro para recorrer las marcas con sus labios, sembrando besos sobre su piel, besos que se humedecen por las lagrimas que sigue derramando.

Sabe que ellos deben librar sus propias batallas, pero una partede ella no puede evitar desear poder protegerles de todo el dolor.

Se gira y le abraza, rodeando con sus manos su cuello. y apoyando la cabeza sobre su hombro. Es extraño ver a la ratoncita confiada en los brazos del gato, pero es la realidad.

-Se que no puedo evitaros que sufrais dolor, pero me gustaria...

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